Terror en el espacio (Terrore nello spazio/Planet of the vampires). 86 minutos.
America-International Pictures (AIP), Italia/España, 1965
Dirección y guión: Mario Bava, basado en la historia "One night of 24 hours" de Renato Pestriniero
Reparto: Barry Sullivan, Norma Bengell, Ángel Aranda, Evi Marandi
Productores: Samuel Z. Arkoff y James H. Nicholson
Música: Gino Marinuzzi Jr.
Argumento: Dos naves espaciales son enviadas a investigar el planeta Aura. Cuando la nave Galliott aterriza allí, los tripulantes se vuelven locos y se agreden mutuamente. Tras recuperar el control sobre sí mismos descubren que otra nave se ha estrellado y los ocupantes han muerto. Los entierran, pero al poco los cadáveres resucitan y comienzan a acosar a los supervivientes. Finalmente descubren que una raza alienígena ha ocupado el cuerpo de los muertos y quiere hacerse con el control de la nave intacta para escapar de ese moribundo planeta y llegar a uno donde puedan establecer su reinado de terror.
Auspiciada por la American International, productora de todo tipo de cine de bajo presupuesto (y bien conocida por las cintas dirigidas por Roger Corman basadas en relatos de Poe), se nos presenta esta co-producción hispano-italiana, rodada en los estudios Cinecitá de Roma por un maestro del cine de terror, Mario Bava (1914-1980). El conocido director de Las tres caras del miedo (I tre volti della paura, 1963) imprime su sello en esta cinta, pues lo que parece ser una película más de ciencia ficción acaba siendo un cuento de terror claustrofóbico. De nuevo los aliens ocupan el cuerpo de sus víctimas para acosar a los protagonistas, como vimos en It came from outer space, pero esta vez son cadáveres vueltos a la vida, con toda la carga de horror que ello conlleva. Una de las mejores escenas de la cinta se da cuando los cuerpos vampirizados salen de sus tumbas, envueltos en bolsas de plástico que se arrancan mostrando las facciones ensangrentadas. Muy de Romero.
Un reducido grupo de actores y lo mínimo en decorados. Sin duda esta cinta inspiraría a directores como John Carpenter (Fantasmas de Marte, Ghost of Mars, 2001) , Tobe Hooper (Lifeforce, 1985, que curiosamente trata de vampiros espaciales), o Ridley Scott(Alien, 1979, al combinar terror y ciencia ficción en un ambiente opresivo) y otras producciones más actuales como como Sunshine (2007) o Serenity (2005).
America-International Pictures (AIP), Italia/España, 1965
Dirección y guión: Mario Bava, basado en la historia "One night of 24 hours" de Renato Pestriniero
Reparto: Barry Sullivan, Norma Bengell, Ángel Aranda, Evi Marandi
Productores: Samuel Z. Arkoff y James H. Nicholson
Música: Gino Marinuzzi Jr.
Argumento: Dos naves espaciales son enviadas a investigar el planeta Aura. Cuando la nave Galliott aterriza allí, los tripulantes se vuelven locos y se agreden mutuamente. Tras recuperar el control sobre sí mismos descubren que otra nave se ha estrellado y los ocupantes han muerto. Los entierran, pero al poco los cadáveres resucitan y comienzan a acosar a los supervivientes. Finalmente descubren que una raza alienígena ha ocupado el cuerpo de los muertos y quiere hacerse con el control de la nave intacta para escapar de ese moribundo planeta y llegar a uno donde puedan establecer su reinado de terror.
Auspiciada por la American International, productora de todo tipo de cine de bajo presupuesto (y bien conocida por las cintas dirigidas por Roger Corman basadas en relatos de Poe), se nos presenta esta co-producción hispano-italiana, rodada en los estudios Cinecitá de Roma por un maestro del cine de terror, Mario Bava (1914-1980). El conocido director de Las tres caras del miedo (I tre volti della paura, 1963) imprime su sello en esta cinta, pues lo que parece ser una película más de ciencia ficción acaba siendo un cuento de terror claustrofóbico. De nuevo los aliens ocupan el cuerpo de sus víctimas para acosar a los protagonistas, como vimos en It came from outer space, pero esta vez son cadáveres vueltos a la vida, con toda la carga de horror que ello conlleva. Una de las mejores escenas de la cinta se da cuando los cuerpos vampirizados salen de sus tumbas, envueltos en bolsas de plástico que se arrancan mostrando las facciones ensangrentadas. Muy de Romero.
Un reducido grupo de actores y lo mínimo en decorados. Sin duda esta cinta inspiraría a directores como John Carpenter (Fantasmas de Marte, Ghost of Mars, 2001) , Tobe Hooper (Lifeforce, 1985, que curiosamente trata de vampiros espaciales), o Ridley Scott(Alien, 1979, al combinar terror y ciencia ficción en un ambiente opresivo) y otras producciones más actuales como como Sunshine (2007) o Serenity (2005).
Si la cinta va sobrada de talento en cuanto a dirección, se queda pobre en efectos especiales y decorados. Como ejemplo, la explosión de una de las naves se resuelve con una vibración de la cámara y, vista en una pantalla, unas luces que se encienden y se apagan simulando el estallido. Todo es muy de cartón piedra, demasiado falso. La nave a base de palancas y puertas correderas de poco fuste, queda extraña para estar situada la historia en un futuro cercano. Pero todo esto se redime al estar contada la historia con la seriedad suficiente como para hacerla entretenida y angustiosa por momentos, con una fotografía y color destacables. Y el final, con la nave ocupada por los aliens llegando al planeta Tierra, sin duda inolvidable.
Editada en dvd en USA por MGM. Ficha de la película en IMDB.
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